Perfilando
Por Iván Calderón
La soberbia, la arrogancia y la pedantería con
la que se condujo el Secretario General de Gobierno de Veracruz, Eric
Patrocinio Cisneros Burgos, fue parte del fracaso donde se arrastró al jefe del
Ejecutivo Estatal, Cuitláhuac García Jiménez, en sus intenciones de instaurar
dos juicios políticos contra el Fiscal General Jorge Winckler Ortiz.
Y es que ante el pleno desconocimiento de las
leyes, así como de la operación política, Cisneros Burgos se ha convertido en
el principal responsable de esta burla nacional, donde con todo y el efecto
“Peje”, un solo hombre ha puesto en jaque a dos poderes. En una entidad donde
la obsesión por sacar al Fiscal, se ha vuelto más importante que la
presentación del Plan Veracruzano de Desarrollo o el de ofrecer seguridad a las
y los veracruzanos.
Convertido en un poderoso político exprés, Eric
Cisneros desconoció por completo que en Veracruz existe autonomía de poderes y
que jamás las amenazas o la coacción servirán para cumplir sus caprichos. Pues
las y los diputados aún bajo la presión que se pueda generar, se comportaron de
forma valiente enfrentándose a un personaje que de aspirante a tesorero
municipal en Otatitlán, se ganó la lotería convirtiéndose en el mal llamado
responsable de la política interna del estado en tiempos de la cuarta
transformación.
Si los legisladores hicieron bien o actuaron
mal, ya la historia los juzgará.
Sin duda.
Se tiene que decir, en cualquier gobierno de
cualquier régimen, luego de este chasco don Eric Cisneros se tendría que ir,
sin honores, por la puerta chica, con una mano adelante y con la otra atrás.
Pues incluso sus modos majaderos y porriles han
metido en varios aprietos a Cuitláhuac García, como la gritoniza a la que se le
expuso en el municipio de Chinameca, el encono que se han generado con diversos
alcaldes, el desconocimiento de sus funciones, o el pretender influir en el
poder judicial, con un claro tráfico de influencias. En fin, una serie de
pifias que en otros momentos y por vergüenza propia otro funcionario ya
estaría presentando su renuncia ante su evidente incapacidad.
Pero bueno, que se puede esperar de un empleado
que se encumbró en lo más alto, sin la experiencia de ser regidor, sindico o
jefe de manzana, vaya sin ningún logro personal, que el de subirse a las
valencianas de Andrés Manuel López Obrador.
Ya veremos cómo le va, pues mientras Cisneros
se aferra a un inmerecido puesto, ya circula el nombre de Rafael Hernández
Villalpando como su sucesor.
Esperemos a ver qué pasa.
@IvanKalderon