Por Billie J Parker *
Palabra de
Mujer (Columna)
Nadie puede negar la popularidad de
AMLO a 100 días del arranque de la 4ª. Transformación. “Quien es dueño de los
medios es dueño de la mente”, pregonaba el gran manipulador de masas, Lev
Davídovich Bronstein, conocido como León Trotski. Personaje que cobra vigencia,
como denuncian distintos actores de la política mundial, al señalar el avance
del socialismo de una izquierda revolucionaria que pregona, no la revolución
del proletariado, sino la de clases en pleno siglo XXI.
Los casi 100 días transcurren entre
la impunidad, omisiones y discursos en 52 conferencias y otros
mítines. Cien acusaciones de actos de corrupción cuyos autores permanecen
con total protección. No hay una sola conferencia de prensa o mitin donde no se
haya levantado el dedo flamígero para señalar a las y los corruptos, empero, no
hay un solo detenido. Discurso acusatorio, que funciona para justificar
acciones que han derivado en afectaciones a la vida de la ciudadanía mexicana.
La misericordia mostrada con los corruptos es como la ejercida durante la
guerra civil de 1917, luego de la Revolución de Octubre de los
bolcheviques, solo para conseguir aliados.
El discurso del 1 de diciembre de
Andrés Manuel López Obrador quedó atrás. Lo de hoy es el aleccionamiento
mañanero donde periodista que se atreva a cuestionar una sola de las
contradicciones del carismático líder es materialmente linchado por las redes,
que dicho sea de paso, succionan del presupuesto. Todas las acciones
emprendidas, no son para abatir la mentada corrupción sino para tirar la
infraestructura estatal y crear otra. Quisiera equivocarme que la concentración
del el poder como la riqueza material es para cubrir las necesidades de
un proyecto revolucionario parecido a la dictadura del proletariado, aunque se
piense anacrónico.
Un plan de gobierno adaptado a la
nueva era, porque como una “revolución permanente”, hay que ajustarla a
los nuevos escenarios del capitalismo y sus tecnologías. Hoy necesita de todas
sus guerrillas, virtuales y reales, pero principalmente de un ejército, rojo o
guinda. De ahí la apelación al perdón o a terceros para resolver los engrudos
en que las acciones fallidas meten al país en un caos. Como es el caso de las
huestes de la CNTE, donde pese a que el gobierno de la 4T tiene toda la
legitimad y el poder de usar la fuerza pública por bloquear vías federales y
causar tremendo hoyo en la economía y el orden del país, le pide a la Comisión
de Derechos humanos que decida. Solo les faltó la consulta popular.
La comisión que encabeza Luis
Raúl González Pérez respondió contundente que ante delitos o actos ilegales el
gobierno encabezado por el Presidente López Obrador, no debe renunciar o
delegar a terceras instancias su responsabilidad, bajo el riesgo de incumplir
con una omisión que vulnere derechos fundamentales, por rehuir a atentados a la
integridad física y el patrimonio de las personas.
En la lógica del pensamiento de las
y los Ideólogos de la 4T, las medidas solo afectan a quienes no votan por
Morena: Hablemos de niños y niñas porque no votan, como acusan las madres en
Puebla; a la alta burocracia, porque son parte del antiguo régimen;
a las mujeres que no coinciden con la obviada política de que el feminismo no
es opción en su proyecto, pese a que la figura Trotski hizo aportes teóricos
sobre el feminismo, abordando el argumento tradicional marxista del papel
de la sociedad de clases en la opresión de las mujeres. Pero ellas en este plan
son sacrificables para algunos patanes de hoy. En esta 4t a las mujeres se les
enfila a la misma opresión económica vía dádivas y más trabajo,
incluyendo a las abuelas.
El tema de las estancias infantiles
genera escozor porque en su discurso fundacional se comprometió a darles
presupuesto y hoy traiciona su palabra. Tema de derechos y en donde el trabajo
de cuidados es un asunto de carácter público que debe ser atendido por el
Estado, por ser la base de la desigualdad entre hombres y mujeres, y porque
tiene que haber una política de fortalecimiento del desarrollo en la primera
infancia. Lo minimizan al grado que el senado bajó de su WEB el boletín donde
se informa que “El Pleno del Senado aprobó acuerdo que exhorta a que se permita
el correcto funcionamiento de las estancias infantiles”.
Y así nos podemos ir, segmento por
segmento, hasta topar con que todo obedece a su plan primigenio de la cuarta
transformación, bajo la lógica de una revolución pacifista. Con una
constitución de transición. ¿Hacia dónde?, una cartilla moral caduca y
misógina, con tonos de la revolución del proletariado trostkista,
aprovechando su legitimidad y aplanadora en el legislativo para
implementar políticas públicas rumbo a ese fin, con una regresión en su
muy peculiar estilo de ejercer el poder, basado en su carisma y no en el cargo,
con discursos contra la corrupción que se queda en la palabra, entre otras
líneas de acción que implementa día con día.
La consigna parece ser la creación
de una base para que puedan permanecer y consolidar su idea
revolucionaria de la IV transformación, al estilo de la IV Internacional de
Trotski, post-era leninista, que contó con cierto apoyo de partidos de
izquierda y de socialdemocracia internacionales. Quien creyó que el movimiento
fue sepultado a la muerte de Trotski, se equivoca, el embrión está
despertando para Internacionalizar la guerra de clases. La transformación del
proletariado en clase dominante, que en palabras llanas se trata de una
exclusión política de las clases burguesas o fifís.
La dominación política del
proletariado, que para su inclusión requiere más que la simple participación
electoral sino cambiar el contenido sociológico de las burocracias dirigentes
(de burgués a obrero, de conservadores al pueblo bueno) por ellos,
discursos, despidos y la exclusión, amén del tipo de estructuras del Estado, de
parlamentarias a formas de democracia directa, con consultas.
Esta transición, que además,
habría de darse de manera gradual: primero con una revolución democrática y
luego emprender las tareas de la construcción del socialismo La dictadura
del proletariado existiría durante el período de transición revolucionaria
entre el capitalismo y la sociedad comunista, hasta que la abolición de todas
las clases sociales la vuelva innecesaria, eso dice la doctrina trostkista, Al
tiempo. *Directora de BillieParkerNoticias.com