Las noticias de Veracruz en Internet

sábado, 13 de abril de 2019

Fuente y Culmen del Año Litúrgico

Comunicado Dominical. Arquidiócesis de Xalapa.

Con la celebración del Domingo de Ramos comenzamos la SEMANA SANTA. Conmemoramos los misterios que nos han dado la salvación. Estos misterios son LA PASIÓN, LA MUERTE Y LA RESURRECCIÓN DE JESÚS.

La celebración del Misterio Pascual de Cristo, se actualiza cada vez que se celebra la sagrada Eucaristía como nos lo recuerda San Pablo en 1 Cor 11, 26 “cada vez que comen de este pan y beben de este cáliz, anuncian la muerte del Señor hasta que vuelva”. La liturgia de la Iglesia Católica, ha celebrado este misterio desde los primeros siglos.

Con las celebraciones de la SEMANA SANTA, el ciclo litúrgico llega a su culmen y al mismo tiempo encuentra en él su fuente. Todo lo que creemos y celebramos en la Iglesia católica encuentra su fundamento en el Misterio Pascual de Cristo y también ésta es la meta a la que aspiramos quienes somos discípulos y misioneros de Cristo.

La Iglesia Católica celebra el misterio total de Cristo durante todo el año litúrgico. Este misterio lo iniciamos con la celebración de su encarnación y nacimiento (Adviento y Navidad), más tarde recorremos su vida pública (34 semanas del tiempo ordinario), hasta llegar a su pasión y muerte que viene seguida por su gloriosa resurrección y el gran don de su Espíritu (Cuaresma, Triduo Pascual, cincuentena pascual).

En estos días de la Semana Santa participaremos en las celebraciones del DOMINGO DE RAMOS, LA MISA CRISMAL y el TRIDUO PASCUAL. Agregamos además los actos de piedad como la procesión con los santos oleos, la visita de las siete casas, el santo viacrucis y la procesión del silencio. Cada una de estas celebraciones tiene un significado muy especial.

EL DOMINGO DE RAMOS DE LA PASIÓN DEL SEÑOR contiene dos grandes momentos. El primero es la conmemoración de la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén y el segundo es la proclamación de la pasión de Jesús.

LA MISA CRISMAL la preside el obispo en la catedral, es concelebrada por una gran cantidad de presbíteros y con la asistencia de muchos fieles. Dentro de esta ceremonia los sacerdotes renuevan las PROMESAS SACERDOTALES que hicieron el día de su ordenación y pasado ese momento, el obispo bendice los santos oleos, que se utilizan en algunos sacramentos. Se trata del SANTO CRISMA, EL ÓLEO DE LOS ENFERMOS Y EL ÓLEO DE LOS CATECÚMENOS.

EL TRIDUO PASCUAL comprende la celebración de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo que va del Jueves al Sábado Santo.

El triduo Pascual se introduce con el JUEVES SANTO a través de la misa de la cena del Señor. En esta celebración se conmemoran 4 grandes acontecimientos: 1) la institución de la Sagrada Eucaristía y 2) del Orden Sagrado, 3) el signo del lavatorio de los pies y, 4) la entrega del mandamiento del amor.

El VIERNES SANTO recordamos la muerte de Jesús. Ese día la Iglesia no celebra el Sacrificio eucarístico, sólo distribuye la sagrada comunión. La celebración litúrgica contiene tres grandes momentos a saber: la liturgia de la palabra con la oración universal, la veneración de la cruz y la sagrada comunión. La celebración de la Pasión del Señor, el viernes santo, está enmarcado por la meditación del sagrado viacrucis y por la procesión del silencio.

EL SÁBADO SANTO celebramos la vigilia pascual, es la celebración con la que se culmina la pascua. La vigilia pascual es la vigilia más importante del año litúrgico porque en ella celebramos la RESURRECCIÓN DE JESÚS, el misterio central de nuestra fe. La vigilia pascual contiene también 4 momentos importantes a saber: 1) El lucernario, donde se bendice el fuego nuevo y se enciende el cirio pascual, 2) La liturgia de la Palabra que recorre 9 lecturas tomadas del Antiguo Testamento y del Nuevo, 3) La liturgia bautismal donde renovamos las promesas de nuestro bautismo y la 4) La liturgia eucarística.

Dispongámonos a participar con mucha devoción y con fe en las distintas ceremonias de la Semana Santa.

Pbro. José Manuel Suazo Reyes