Desde el
Café
Bernardo
Gutiérrez Parra
Con la
visita del senador Dante Delgado a Veracruz comenzaron los escarceos rumbo a la
gubernatura en 2024. ¿Que aún es muy temprano? Por supuesto que lo es, pero
Dante ya se anda moviendo. No hubo columnista que no lo pusiera como candidato
de su partido Movimiento Ciudadano a la gubernatura de la entidad.
El
problema es que para el 2024 será un joven invernal con 73 años a cuestas.
Otro que tiene
el dedo arriba (de hecho, nunca lo ha bajado) es el diputado federal del PRI
Héctor Yunes Landa que también estará en las boletas, aunque no será por el
partido tricolor.
Quien le
está cerrando las puertas es el líder estatal Marlon Ramírez que aquí entre tu
y yo lector, lo pasa pero no lo traga. Y tras Marlon está la gran mayoría de
tricolores que no desean volverlo a ver como su candidato.
Es
probable que Yunes Landa sea abanderado del PVEM o de algún partidito que esté
por obtener su registro. Pero de que va, va.
El PAN
tiene que pasar por la elección extraordinaria del próximo 8 de septiembre para
que sus militantes sepan hacia dónde soplará el viento. Si Pepe Mancha repite
en la dirigencia el candidato será Miguel Ángel Yunes Márquez. Pero si el
ganador el Joaquín Guzmán Avilés, el abanico de posibilidades se ampliará y uno
de los que buscará la candidatura será Julen Rementeria del Puerto.
El PRD se
encuentra en proceso de extinción; si va solo en la contienda la patiza será
colosal. Si piensa ir coaligado deberá buscar un aliado que le garantice seguir
en la nómina presupuestal.
En Morena
lo que sobran son candidatos y no para el 2024 sino para el 2020, año en que
casi todo mundo da por descontado que Cuitláhuac García será enviado a una
subsecretaría.
Entre los
que están más que apuntados figuran Manuel Huerta Ladrón de Guevara, Zenyazen
Escobar (No te rías lector que esto es serio) y Eric Patrocinio Cisneros (Oh
caramba, ¿y ahora por qué las carcajadas?).
Pero las
barajas de López Obrador son Rocío Nahle y Ricardo Ahued.
Si la
candidata es Rocío, aguas. Pero si es Ahued las posibilidades de ganar se irán
a las nubes.
¿Y el PRI?
Si hasta
las pasadas elecciones lo que le sobraba al ex partidazo eran candidatos a la
gubernatura, para el 2024 se reducirán casi a su mínima expresión. Con
excepción de Yunes Landa que va a todas, nadie querrá competir por un partido devaluado
y devastado. Pero reitero, Héctor no irá por el PRI.
Aunque
parezca contradictorio, la única carta para que el tricolor vuelva a tener el
fuelle de partido grande en la entidad se llama José Francisco Yunes Zorrilla.
Sí, el
candidato perdedor en la última elección. El que se fue al tercer lugar con
apenas medio millón de sufragios. Al que le pasaron por encima Cuitláhuac
García con un millón 600 mil votos y Yunes Márquez con un millón 200 mil. El
mismo al que dejaron solo los priistas.
¿Con esas
referencias por qué habría de ser Pepe otra vez? Porque casi todos los
veracruzanos sin distinción de partido, reconocieron en el peroteño al mejor
candidato, compitiendo en el peor momento y en el peor de los escenarios.
Ya sin los
lastres que le tocó cargar, el horizonte de Pepe se ensancha porque sigue
siendo considerado muy buen prospecto. Al menos hasta hoy, no hay otro que le
haga sombra en el PRI de Veracruz.
En
síntesis, las boletas para el 2024 llevarán (tentativamente) a Dante que hará
ruido; a Yunes Landa con nulas posibilidades y a Ricardo Ahued y a Pepe Yunes
como los candidatos a vencer.
En el caso
del PAN, si el abanderado es Yunes Márquez aguas, aguas.
¿Qué
posibilidades tiene de ganar? Quién sabe, los Yunes azules son más temidos que
queridos y si los panistas tradicionales que nomás los detestan, votan como
votaron los priistas en las pasadas elecciones, adiós a su sueño de convertir a
Veracruz en una monarquía hereditaria.
Si otro es
el candidato, la competencia se pondrá interesante entre éste con Ahued y Yunes
Zorrilla y quien gane lo hará por un margen estrecho. Para nada se dispararán
las diferencias como el año anterior.
Y por
último lo subrayo; si Morena manda a Rocío Nahle en lugar de Ahued, el sueño de
continuidad en la entidad terminará el 30 de noviembre de 2024.
Has de
disculpar lector esta tempranísima entrega de futurismo político-electoral. Lo
que sucede es que estoy hasta el gorro de hablar de la violencia, abandono e
indolencia que padece Veracruz. E imagino que tu también.
Lo
anterior tiene que ver con la sentencia de cinco años de prisión que le fue
dictada en días pasados a Diego Cruz, uno de los jóvenes apodados “Los Porkys”
que en 2015 fueron acusados de abusar sexualmente de una menor de edad. Esta
sentencia le permitirá a Diego salir de prisión mediante el pago de una fianza.
En ese año
Diego y sus amigos Enrique Capitaine, Jorge Coatita y Gerardo Rodríguez fueron
señalados por la menor de abuso sexual. Diego y Enrique fueron capturados y
procesados, Jorge se encuentra prófugo desde entonces y Gerardo fue absuelto.
El
comunicado señala que en caso de ser procedente, el servidor público podría ser
sancionado desde un apercibimiento privado hasta la inhabilitación del mismo,
si su desempeño no se hubiera apegado a la normatividad ni a las leyes
vigentes.
Agrega que
el Consejo de la Judicatura “tiene en todo momento la obligación de proteger,
promover, respetar y salvaguardar los derechos humanos de los justiciables” Por
ello reitera su compromiso con la
impartición de una justicia pronta y expedita observando siempre el principio
fundamental de juzgar con perspectiva de género.