Desde el Café
Bernardo Gutiérrez Parra
Han pasado poco más de 740 días desde que Morena
arrasó en las elecciones. Su fuerza fue tal que si se en efecto y como lo dijo
López Obrador, alguien hubiera postulado a una vaca para cualquier puesto de
elección popular de gobernador para abajo, el cuadrúpedo habría ganado.
Pero en poco más de dos años el partido ha visto
disminuir sus expectativas casi en la misma proporción en que las generó,
porque sus gobernadores, senadores, diputados y alcaldes han resultado un
fiasco en el ejercicio de sus funciones.
¿Qué hacer con un partido devaluado pero que detenta
el poder, cuando en once meses habrá elecciones?
Fraude, no queda de otra.
Aprovechando que son mayoría en varios Congresos estatales,
los morenos se han dado a la tarea de “reformar” a su conveniencia la
Constitución de sus entidades. Y Veracruz no es la excepción.
Una de esas “reformas” tiene que ver con la
desaparición de los Consejos Electorales Municipales lo que vendrá siendo la sartén
donde se cocine el mega fraude del 2021.
Me explico.
Cada que hay elecciones tu voto se cuenta en el
municipio donde sufragaste y una vez contado, el paquete electoral se envía al
Consejo Electoral Distrital. Pero antes de que el paquete viaje tu ya supiste
quién ganó y quién perdió en tu municipio.
Con esta “reforma”, los votos serán contados en los
Consejos Electorales Distritales. Es decir, toda la paquetería electoral con
los votos sin contar, las actas sin cotejar y las firmas de los funcionarios de
casilla que no sabrán lo que firmaron, será revisada y avalada lejos del lugar
donde sufragaste.
Va un ejemplo: Pánuco es el distrito electoral 1 y tiene
seis municipios: El Higo, Ozuluama, Pueblo Viejo, Tampico Alto, Tempoal y el
mismo Pánuco. Bien, todos los sufragios que se depositen en cada uno de esos
municipios serán concentrados en Pánuco para que se cuenten ahí. Si votaste en
Tempoal tendrás que esperar a que tu voto llegue a Pánuco y lo cuenten para que
sepas el resultado.
¿Te imaginas la rebambaramba que se va a armar,
lector?
Imagínate la de broncas que habrá en los municipios de
la sierra. Si hay ochenta o más casillas, serán ochenta o más los viajes que
tendrán que hacer los encargados de llevar las boletas a los Consejos
Electorales Distritales.
El peregrino argumento de que las reformas se hacen
para ahorrar dinero es una burda falacia. Porque no es un ahorro lo que se
pretende sino un fraude avalado por el Congreso.
Por principio de cuentas no alcanzarán las patrullas
de ningún municipio para hacer tanto viaje, por lo que se necesitará de otro
tipo de vehículos susceptibles a que se altere la votación en el camino.
Y eso nomás para empezar.
En conferencia de prensa ofrecida el martes anterior y
al tocar el tema, el dirigente estatal del PRI, Marlon Ramírez Marín, dijo que
ante el temor de perder en las elecciones intermedias, Morena prepara las
condiciones jurídicas para robarse la elección.
“Pretenden
modificar el marco legal a modo, manipular el conteo de votos; buscan evitar la
revocación de mandato, la desaparición de los consejos municipales que hoy (el
martes) estamos controvirtiendo. En este momento el jefe jurídico del PRI se
encuentra en la Suprema Corte de Justicia de la Nación para que le reciban
nuestra acción de inconstitucionalidad”.
Agregó que
estas reformas que en fecha reciente fueron aprobadas en Veracruz, tienen objetivos
más ambiciosos que el simple “ahorro” en el pago de prerrogativas a los
partidos políticos, pues pretenden controlar el manejo de los cómputos
electorales y modificar los medios de impugnación.
Pero dijo
que no se van a quedar callados ante lo que están haciendo los morenos.
“Mientras no terminen de despedazar las leyes y la Constitución, tenemos
derechos que nos asisten y tenemos que hacerlos valer ante los tribunales.
Acudiremos a ellos y a la protesta pública para que entiendan su
responsabilidad y que lo que ganaron fue una elección, no una revolución”.
Si la SCJN
no echa para abajo este mega fraude disfrazado de reforma constitucional, que
nadie se diga sorprendido si un día después de las elecciones del 2021 se
sueltan los demonios y suceden cosas graves, pero mucho más graves que simples
manifestaciones de inconformidad o descontento.