Desde el Café
Bernardo Gutiérrez Parra
El pasado 4 de junio cuando se cumplió el tercer día
de la Nueva Normalidad y había en el país 105 mil 608 contagios confirmados de coronavirus
y 12 mil 545 muertes, el doctor Hugo López-Gatell soltó la frase por la que
será recordado por generaciones: “Un escenario catastrófico serán 60 mil
muertes”. Y anoche nos fuimos a dormir con 912 mil 811 contagios y 90 mil 773
muertes. Es decir, 30 mil 773 muertes más que el escenario catastrófico.
La frase la soltó durante una conferencia de prensa en
el lugar de sus éxitos, el Palacio Nacional. ¿Pero en qué contexto la dijo? Es
lo que yo quisiera saber lector, porque López-Gatell habló desde el cenit de su
soberbia y sus palabras fueron reproducidas en un video de 3 minutos con 39
segundos cuyo linck te paso (https://www.youtube.com/watch?v=r10M6k-kGM4)
y donde fue de lo difuso a lo confuso; se metió en un laberinto verbal donde
pareció estar cómodo y desde ahí disparó sus disparates.
En ese mes se daba por descontado que la pandemia nos
habría pelado los dientes para octubre porque “la estamos aplanando; ya se ve
la luz al final del túnel”, decía López Obrador y Hugo nomás sonreía.
Con la claridad verbal que caracteriza a los miembros
de la 4T y parece ser su signo distintivo, López-Gatell dijo aquella ocasión:
“Para hacer esa estimación (de enfermos y fallecidos) consideramos
un repertorio, un rango, un intervalo, de incidencias de tasas de ataque. Desde
punto cinco por ciento, la que existía en ese momento en Hubei (China), y
quisimos estimar de más y no de menos. Entonces consideramos punto cinco, punto
uno, punto dos, punto cinco o sea punto cero cinco; punto uno, punto dos, punto
cinco, uno e incluso dos”.
Más turbio ni el café con garbanzo, pero siguió
disparando:
“Y en ese intervalo tuvimos un conjunto de números que
presentó el doctor López Ridaura en una ocasión cuando habló de proceso de
escalamiento hospitalario y la procuración de insumos. El mínimo (de muertes)
era 6 mil, otro escenario era 8 mil, otro era 12 mil 500. Y teníamos así hasta
28 mil que se redondea de los 30 mil. E incluso un escenario muy catastrófico
que podía llegar a los 60 mil (muertos).
“No descartamos todavía un intervalo hasta 30 mil o 35
mil (muertes) y es el que comenté con las y los senadores y comenté con las y
los diputados. Y es el intervalo plausible (sic) de lo que podemos encontrar”.
Me quiero detener en los 30 mil muertos que se supone iban
a ser el número máximo en un país donde para octubre la pandemia se estaría
yendo. Pero resulta que ni se está yendo y esos 30 mil muertos (30 mil 773 para
ser exactos), son los que rebasan en más de la mitad el escenario de lo
catastrófico.
Durante aquella conferencia fueron dos veces las que López-Gatell
utilizó las palabras “escenarios plausibles”. Y no me queda claro si hay que
aplaudirle a él o aplaudir los escenarios de muertes y contagios.
Desde entonces ya chafeaba el Subsecretario de Salud.
Desde entonces debieron darle las gracias y mandarlo a su casa. Pero en Palacio
Nacional no sólo lo aguantan sino que lo apoyan, apapachan, miman, toleran y
colman de elogios, mientras el dolor y las defunciones se multiplican en un
país donde el Covid-19 se irá hasta el 2022, según el nuevo pronóstico de López-Gatell.
¿Cuántos muertos más se necesitan para López Obrador
abra los ojos y lo corra?
Se
reúnen Marlon y Alito en la CDMX
Este jueves se reunieron en la Ciudad de México el
líder del PRI en Veracruz, Marlon Ramírez Marín y Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas,
presidente nacional del tricolor. Y la reunión fue tan fructífera que Alito
subió este mensaje a sus redes socales: “Me reúno con mi amigo
@Marlon_RamirezM, Presidente del @PRIVeracruz_, estamos trabajando muy de cerca
para fortalecer a nuestro Partido en su entidad”.
¿De qué hablaron? De seguir fortaleciendo la
comunicación y de las posibles alianzas con otros partidos. Mientras Alejandro
Moreno enfatizó está trabajando muy de cerca con Marlon para fortalecer al PRI en
Veracruz, Marlon dijo que desde que se asumió la dirigencia, no se ha dejado de
caminar y al día de hoy se han renovado los 212 comités municipales, los
consejos políticos municipales y alrededor del setenta por ciento de comités
seccionales. “Hoy hay en Veracruz un partido con estructura que sirve de guía
para seguir con la renovación de nuestros sectores y organizaciones” indicó.
Y la verdad sea dicha, ambos jerarcas están trabajando
duro porque Veracruz vuelva a ser el bastión que fue del PRI por más de 80
años. Si en el 2021 el tricolor gana más de las 36 alcaldías que tiene en la
actualidad y al menos una decena de curules en el Congreso local, tanto el
partido como Marlon Ramírez se habrán ido a los cuernos de la luna y llegarán
muy bien posicionados a las elecciones del 2024.
Faltan ocho meses para que lo sepamos.