Luis Bustos
Puede uno estar de acuerdo o no con
la trayectoria del PRI en la vida nacional, pero no puede uno negar que ha sido
el partido que ha construido y transformado la realidad conforme a las épocas,
a las circunstancias y a los ritmos de los avances de la humanidad.
Caminos, electricidad,
urbanización, hospitales, escuelas, Instituciones, etc.; han sido construidos o
creados en los distintos gobiernos del PRI, y conservados, reforzados,
modificados, modernizados, por dos gobiernos del PAN.
A lo largo del siglo XX, fue la
mano de los gobernantes emanados del PRI, los que construyeron lo que es el
México actual.
En ese orden de ideas, hay que
decirlo, en México, se nacía priista y Guadalupano; así crecíamos, con el
escudo partidario y la estampita de la virgen.
Por esa razón, casi todos los
políticos, a excepción de la mayoría del PAN, han iniciado su participación
política en las filas del PRI.
Ahí, en esas filas, había
disciplina y respeto hacia las decisiones cupulares…. En todo inicio, se podía
estar de acuerdo o no, pero una vez que se tomaba la decisión, todos se sumaban
para sacar adelante la propuesta, el proyecto o la candidatura….eso permitió
que se tomaran acuerdos y compromisos que algunas veces se saldaban y en otras
no, pero, de hecho, no pasaba nada con las inconformidades. Todos marchaban
firmes y derechitos.
Como observador de la vida nacional,
me llama mucho la atención que hoy en día, por las circunstancias que sean, un
militante que fue gobernador y luego presidente, está siendo vapuleado por supuestas
indagatorias que, hasta en este momento, sin prueba y evidencia alguna, lo
están deshonrando ante la opinión pública y, ni por gratitud y menos por
lealtad, se ha visto a un priista salir a fijar una postura digna que se
contraponga a las indagatorias de la Fiscalía General de la República, que
están siendo sustentadas en declaraciones de un personaje que, por sí mismo, se
ha declarado como un delincuente confeso.
No estoy diciendo que Enrique Peña
Nieto sea inocente, ni tampoco lo contrario, porque eso le corresponde, primero
a la autoridad investigadora al sustentar debidamente su indagatoria para que
al ponerla en manos de un juez, con el suficiente material de probanza, sea
suficiente para que el juzgador tenga fundado expedir la orden de aprehensión,
que le sea solicitada.
No, a lo que yo me refiero es a la
ausencia, o desaparición, de personajes de la política nacional que fueron
beneficiados por el expresidente Peña, como Miguel Osorio Chong (ex titular de
Segob y actual Coordinador del PRI en el Senado), René Juárez Cisneros (Senador
del PRI en 2012, Subsecretario de gobernación
en 2016/2018, presidente del PRI nacional en 2018 y actual coordinador
de diputados en San Lázaro), Alejandro Moreno (gobernador de Campeche y actual
dirigente nacional del PRI), Beatriz Paredes (ex casi de todo), Omar Fayad,
gobernador de Hidalgo, José Murat (papá e hijo, los dos beneficiados del
sistema y de Peña), los eternos coordinadores legislativos del PRI, Emilio
Gamboa y Manlio Fabio Beltrones, entre muchos, muchísimos más que tendrían la
obligación moral de cuando menos, dar la cara, quizás más que por Peña, por el
sistema que ayudaron a instaurar y consolidar.
Finalmente, hay que decirlo, hoy en
día, se pueden escuchar los toquidos a las puertas del PRI: Toc, Toc, toc, cada
vez más fuertes y con mayor insistencia; de tal suerte que si continúa el
silencio, la parálisis y la omisión de los priistas, pueden estar propiciando,
ellos mismos, un daño irreparable para su instituto político.
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