El viernes anterior el presidente municipal de Xalapa, Hipólito Rodríguez Herrero, volvió a hacer gala de su ignorancia al manifestar que en 2010 el entonces alcalde David Velasco Chedraui, dejó de pagar un crédito por 200 millones de pesos para la construcción de una planta de tratamiento de aguas residuales.
Entrevistado
por una televisora local, dijo que esto provocó que la deuda se duplicara en
400 millones de pesos y se volviera prácticamente impagable. Agregó que el
crédito se contrató en 2008 con Banobras, pero se dejó de pagar y luego se
reestructuró en términos “usureros”, pues el Ayuntamiento que preside paga
anualmente 40 millones de pesos de los que sólo cuatro millones van al capital
y el resto (36 millones), van a los intereses.
“Por
alguna razón que no me queda claro, durante dos años no se pagó el agua… Ahora
el ayuntamiento y la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS) deben
pagar más porque la forma en que se negoció la deuda fue nociva para las
finanzas y patrimonio de los xalapeños”. indicó.
Y a
renglón seguido manifestó: “Nadie en su sano juicio contrata un crédito de esa
manera. ¿Cómo es posible que se pague tanto de interés y casi nada de capital?”
Norteado,
despistado y pésimamente informado Hipólito volvió a desbarrar por enésima
ocasión.
Ese
crédito se contrató en diciembre del 2003 cuando Reynaldo Escobar Pérez era munícipe
de Xalapa.
En 2007,
durante la administración de Ricardo Ahued Bardahuil (y no en 2008 cuando ya
era alcalde David Velasco Chedraui), la Comisión Permanente del Congreso del
Estado, autorizó al alcalde Ricardo Ahued un crédito con Banobras por 476
millones 800 mil pesos para cubrir el adeudo que tenía la CMAS con la empresa
Aguas Tratadas de Xalapa.
Ese
crédito sustituyó al otorgado por Banobras a la administración de Reynaldo
Escobar.
Si el
contrato que se firmó fue “usurero” o no, eso es responsabilidad de Ricardo
Ahued, que en ese entonces fungía como alcalde. Y no de David Velasco, que
cuando llegó al gobierno municipal y se encontró con semejante problema,
reestructuró el crédito para que no fuera tan leonino.
Hipólito
aprovechó la entrevista para pegarle a David (no hay que olvidar que Velasco
Chedraui busca la candidatura a la alcaldía de Xalapa por la coalición PAN, PRI
y PRD), pero para su desgracia le pegó en la boca del estómago a Ricardo Ahued,
candidato de su partido y quien busca también sucederlo en la alcaldía.
El
descontón que recibió Ricardo por quien se supone es su compañero de partido,
puede traerle dolores de cabeza durante la campaña, por lo que alguien debería
decirle al xochimilca que calladito abona más a la causa.
En la
entrevista Hipólito dijo que pidió apoyo al Presidente Andrés Manuel López
Obrador y gracias a su intervención, habrá un convenio para bajar la tasa de
intereses y una reestructuración que le permita al Ayuntamiento amortizar la
deuda.
Bien
por eso. Pero en lugar de tratar de enlodar a los de enfrente, bueno sería que
comience a echar su basura debajo del tapete. Le quedan unos meses para
entregar el poder municipal y hay muchas cosas turbias que más temprano que
tarde tendrá que explicar.
Los
subejercicios, los sueldazos al personal de la CDMX incrustado en la comuna, los
señalamientos de corrupción, obras de dudoso costo (¿Cómo que una ciclopista
región cuatro que aún no se termina costó 14 millones de pesos?) y 900 millones
de pesos que, dice, invirtió en Obra Pública son algunos pendientes que deberá
aclarar.
Si es
verdad que invirtió 900 millones de pesos en Obra Pública, será el primer
alcalde en 40 años con una inversión tan flaca. Además, deberá decir en dónde
los invirtió porque nomás no se ven por ningún lado.
Ya que
le solicitó ayuda al Presidente, hubiera aprovechado el viaje para pedirle el
nombre de un buen bufete de abogados, porque a partir del último día de diciembre
seguro que los va a necesitar.
El video que
impulsó a Rubén Carrasco
Como
te comenté la semana anterior lector, el empresario Rubén Darío Carrasco está
resultando toda una revelación en Misantla y municipios aledaños donde compite
por el Partido del Trabajo a la diputación local. Casi desconocido hace apenas
unos meses en el escenario político, en la actualidad va en punta en las
preferencias electorales, por encima de Gustavo Moreno, que compite por Morena
y Román Bastida que lo hace por el Partido Verde.
En su
afán por “bajarlo del caballo”, alguien filtró el video de una entrevista que
Rubén concedió hace cinco años donde critica tanto a Andrés Manuel López
Obrador como a Cuitláhuac García. Pero mañosamente editaron la parte donde
critica también a los candidatos del PAN y del PRI.
En
otros tiempos ese video hubiera bastado para anularlo y proscribirlo. Pero que
ni López Obrador ni Cuitláhuac hicieran el menor pancho, demuestra la madurez
política de ambos.
Por
otra parte, nada de lo anterior ha bastado para restarle impulso al joven
empresario, pues la respuesta a esas filtraciones ha sido un amplio respaldo a
su proyecto. Además, quienes filtraron el video pasaron por alto los
testimonios que muestran cómo, en 2005, Gustavo Moreno, entonces diputado
federal por el PRI, votó a favor del desafuero de Andrés Manuel López Obrador.
Ni
duda cabe, los tiempos cambian.