De entre los diputados federales que a partir de esta semana ocupan una curul en el Congreso de la Unión surgirán candidatos a gobernador. No precisamente el ganador, aunque en una de esas sí.
Mencionaré a potenciales aspirantes por distintos partidos.
No todos los citados aparecerán en las boletas en 2024. De cualquier modo, harán
su lucha.
En un primer posible escenario donde los partidos existentes contendieran
solos, por el PRI figura como uno de los más aventajados el de Perote, Pepe
Yunes en su segundo intento.
En el PAN la caballada está flaca. Me refiero en este caso solo
a diputados federales de este partido.
Por el cada vez más debilitado PRD, aunque no lo crean, el
hoy encarcelado Rogelio Franco podría salir fortalecido y, si no hay alianza,
hasta sería candidato a gobernador.
EL PT no tiene cuadros fuertes, sin embargo, en el pasado ha
jugado solo. Esta vez podría echar mano de algún diputado de MORENA prestado.
Hasta aquí los diputados federales entrantes. Continuemos.
En Movimiento Ciudadano tendrían listo a su fundador y líder Dante
Delgado o a cualquiera de la sociedad civil, incluido algún miembro distinguido
de otro partido. ¿Por qué no?
Por el Partido Verde el más visible es el sacrificado de
última hora por paridad de género en la Cámara de Diputados, Javier Herrera
Borunda, heredero de ya saben quién, lo cual le puede beneficiar o perjudicar
según se le quiera ver. Hijo de tigre, pintito.
Por el PAN, Julén Rementería estaría puestísimo y más ahora
con los Yunes Márquez prácticamente fuera de la contienda. Les ha pesado
aquello de “no le saques, loco” y “viejo guango”. Algunas ofensas no se
olvidan.
Hay más, Héctor Yunes (¿en Veracruz no existen otros
apellidos?, se preguntarán), es el más movido y aguerrido de los priistas del
momento en redes sociales y en cuanto foro encuentra. Como Pepe, ansía la
revancha.
En Morena sólo hay dos con altas probabilidades, Ricardo
Ahued y Rocío Nahle. Uno de ellos tiene segura la candidatura.
Los prospectos locales, o sea, los favoritos de Cuitláhuac
García no cuentan. Están verdes.
No significa que uno de estos vaya a ganar la elección. Tampoco
que todos los aquí enlistados resultarán seleccionados. Son los de mayores posibilidades
de participar. Algunos no tienen la mínima probabilidad de triunfo y lo
intentarán.
Acaso habrá otra vez alianzas y nuevos partidos. En próximas
columnas agregaré más mujeres. También pueden.