* “La Fernandomanía abrió las puertas con mayor énfasis al
pelotero mexicano en Grandes Ligas”
* “Ahora Julio Urías está demostrando otra etapa”
* “Muy importante el impulso al beisbol en niños y jóvenes,
bien por las Academias”
* “Hombres de bien hace el béisbol”
VARIEDADES
Por: Camilo Hernández.
Teniendo como emblemático escenario el recién remodelado
Estadio de Beisbol “Beto Ávila” frente a nosotros, donde -justo en la entrada-
puede apreciarse la estatua del campeón de bateo de Ligas Mayores, una de las
máximas figuras del Rey de los Deportes, así como un casco gigante de El Águila
de Veracruz, nos concedió una entrevista para este espacio el destacado
periodista, cronista deportivo y escritor, Jesús Alberto Rubio Salazar, quien
da vida a su gustada Columna “Al Bat” que publican diversos medios escritos y
digitales dentro y fuera del país.
Tras degustar del tradicional “lechero” acompañado de las
famosas “picadas veracruzanas” y otras tantas delicias, pasamos del exquisito
“desayuno navideño” a una nutrida y amena conversación que se prolongó con LA
ENTREVISTA, que gustosamente compartimos con todos ustedes.
- ¿Su opinión sobre la brillante participación de mexicanos
en las Grandes Ligas, como Julio Urías, de ese “boom” en los últimos años de la
nueva camada de peloteros que han puesto en alto a México?:
“En la historia del beisbol de México hemos tenido a grandes
figuras que han llegado a Grandes Ligas, demostrando un nivel excepcional como
Beto Ávila, y Melo Almada (el primer mexicano en jugar en las Grandes Ligas en
1933), entre otros, pero es a partir de Fernando Valenzuela cuando comienza esa
transformación, las franquicias comienzan a voltear hacia el beisbol de México
con ese fenómeno de la ‘Fernandomanía’ que prácticamente le abre las puertas al
pelotero mexicano con más énfasis-amplitud, y a partir de ahí comienzan a
surgir grandes figuras. Ya habían estado Vicente Romo, Enrique Peña, Horacio
Piña, el ‘Payo’ Jorge Rubio, Maximino León con Bravos de Atlanta, Ángel Moreno
con Anaheim, Celerino Sánchez, entre otros. Desde entonces se comienza a ver
ese gran potencial, que las posibilidades del pelotero mexicano de llegar son
reales, no con la misma cantidad de peloteros de otros países como Dominicana,
Venezuela y Puerto Rico, pero sí México ascendiendo cada vez más. Ahora Julio
Urías está demostrando otra etapa como aquella de Fernando Valenzuela, donde de
nueva cuenta voltean a ver no sólo al pelotero ya establecido, sino a las
nuevas generaciones de jóvenes que parten de algunas Academias, a los 16, 17 o
18 años ya los captan, ingresándolos a Sucursales de las Organizaciones y con
esa posibilidad de resaltar, es el proceso que estamos viendo…”
Es entonces que el decano del periodismo deportivo con casi
50 años de trayectoria, quien hace algún tiempo trabajó en medios impresos del
Puerto de Veracruz, donde se desarrolló el “encuentro amistoso” con quien esto
escribe, resalta el importante papel de las Academias de Beisbol creadas por el
actual gobierno federal.
“…se viene a reforzar con la política de este gobierno con
las Academias que ya están abiertas en Texcoco, Campeche, Veracruz, Hermosillo
y Obregón, donde van a estar ahí llevando el estudio combinado con el beisbol,
jóvenes aspirantes a ser peloteros profesionales, o bien, sino alcanzan esa
expectativa formarse en un bachillerato tecnológico con apoyo becario que es muy
importante”.
El estimado amigo, Jesús Alberto Rubio, oriundo de Guaymas,
Sonora, quien actualmente radica en Hermosillo, donde también fue docente en la
Universidad de Sonora (UNISON), plantel educativo en el cual hasta la fecha
sigue colaborando, profundizó en su comentario sobre el acierto de impulsar el
beisbol entre las nuevas generaciones.
“Si en Estados Unidos las Universidades privadas y públicas
otorgan amplios programas de becas, aquí en México: ¿Quién lo hacía?. A
excepción de una u otra franquicia como los Tigres que tuvieron su Academia,
Diablos Rojos, o la Liga Mexicana que tiene su Academia en Monterrey o Harp Helú
en Oaxaca, pero estamos hablando de cuatro o cinco escenarios cuando nuestro
país es vasto, y en ese horizonte cuántos jóvenes aspiran a ser peloteros profesionales, pero que
necesitan de apoyo Beca-Academia. Y creo que esta política de la Administración
federal debería replicarse en cada Entidad del país, que las Comisiones
Estatales o Institutos del Deporte le den su valor al beisbol y lo impulsen”;
matizó.
Justo en una “cantera” de grandes peloteros como Veracruz,
el distinguido columnista, quien nos comentó que en su momento llegó a tener
una entrañable amistad con el brillante pelotero de Grandes Ligas, Roberto
Francisco “Beto” Ávila González (QEPD) -recordando gratamente algunos
anécdotas-, destacó también otros Estados del país donde históricamente han
surgido enormes talentos del beisbol que han jugado en Ligas Mayores.
“Nuevo León, Chihuahua, Sinaloa, Baja California, Sonora,
Yucatán, Entidades que han producido grandes peloteros, de donde han surgido la
mayoría que incluso llegan a Grandes Ligas”; subrayó.
Fomentar el beisbol en niños y jóvenes, debe ser tarea
fundamental, consideró.
“A partir de Ligas Infantiles -de biberón como decimos- en
un proceso donde incluso las Universidades deben tener un papel. Hay eventos
donde acuden selecciones universitarias de beisbol y dentro de ellas hay
grandes talentos, y hay que apoyarlos, porque es de las Universidades de donde
hoy están saliendo la mayor parte de peloteros, no del barrio, de los campos
llaneros como sucedía en antaño, aquellos grandes peloteros que se fueron a
Estados Unidos eran producto del beisbol llanero, hoy la mayoría están saliendo
de procesos de enseñanza, ya sea becados en México o los becan en Colegios de
Estados Unidos”.
Hizo hincapié en que hablar de beisbol es referirse a un
deporte donde se puede trascender, una “gran profesión” que puede ir de la mano
con la formación educativa.
“El ser pelotero profesional es un trabajo excepcional, es
otra profesión y si es bien cuidada cuánta producción sana puede darnos y
cuánta enseñanza, son modelos a seguir. Lo estamos viendo con Fernando
Valenzuela, hoy todo un empresario, dueño
de una franquicia -Los Tigres de Quintana Roo-, sigue en la franquicia de los
Dodgers como analista-comentarista, es un hombre de bien que se hizo a través
del beisbol, Vinicio Castilla es otro ejemplo…”
Definitivo impulsar el deporte para alejar de “los vicios” a
la juventud, expresó a pregunta expresa JARS:
“El fomento al Amor, a la Educación, al Deporte, a una nueva
cultura de respeto e inclusión, de tolerancia a esa juventud que necesita del
respaldo moral, que entiendan los valores de una sociedad que quiere ser sana,
ahí están y tenemos que apoyarlos, desde las instancias gubernamentales,
nuestra familia, las universidades, desde nuestras trincheras como periodistas,
hacerles sentir que tienen respaldo y que necesitamos de ellos, modelos a
seguir, que se repliquen una y otra vez, porque como suele decirse, la familia
es la base de una sociedad, y una familia sana, con hijos sanos, van a ser
grande a un país, y eso es lo que queremos, un México sano, constructivo,
alejado de factores que hacen perder vidas”.
Para cerrar con broche de oro: “Beisbol es pasión”, con esa
frase describió al Rey de los Deportes, esbozando una sonrisa, y así dar paso a
la “foto para recordar” un extraordinario momento en la zona conurbada
Veracruz-Boca del Río, primero en el tradicional café, y después en la entrada
del Estadio de Beisbol…
*** SUS LIBROS.- Nuestro entrevistado también se ha
destacado como escritor, siendo de su Autoría los libros: “Zenón Ochoa: Un
trabajador del Beisbol” y “Gustavo Hodgers Rico. Ejemplar en el deporte…y el
beisbol”. Además tiene otro libro en proyecto: “Ronnie Camacho: Sueños Hechos
Realidad”, y uno más en preparación sobre la vida de Benjamín “Cananea” Reyes.
*** ¡FELIZ AÑO NUEVO!.- Estimados lectores, lo mejor de lo
mejor para todos Ustedes en la cuenta regresiva para darle la bienvenida a
2022. Que haya dicha y prosperidad, pero sobre todo mucha salud entre sus
familias en tiempos complicados a causa del virus mortal de nuestra época.
Reciban una “lluvia de bendiciones”, gracias por leernos…
¡Agradezco el favor de su atención!
D.M. Nos saludamos hasta la próxima entrega.